Guía para iniciar un negocio en el hogar

 

 Por Marie Custodio Collazo / mcustodio@elnuevodia.com

 Trabajar desde la casa es el sueño de muchos, y si a eso se le suman la alta tasa de desempleo y el aumento en el costo de vida, la fórmula es perfecta para que florezcan los negocios en el hogar. Desde oficinas profesionales hasta servicios de catering, confección de bizcochos o prendas, las opciones son variadas, según la preparación y los intereses de cada persona. Asimismo, la casa puede ser el punto de partida para una empresa emergente.

Anita Paniagua, autora del libro “Emprendeser” y formadora de emprendedores, resaltó que los negocios en el hogar necesitan la misma estructura que aquellos que se establecen en locales comerciales. “Un negocio es un negocio, no importa si es desde el hogar o se hace a tiempo parcial”, resaltó.

A pesar de que es común que se establezcan microempresas en los hogares sin solicitar permisos ni seguir las regulaciones, existe la posibilidad de que alguna agencia intervenga y multe al propietario o incluso cierre el negocio.

Lo principal será obtener un permiso de uso. Si la empresa no ocupa más del 25% de la residencia puede solicitar un permiso de uso domiciliario en la Oficina de Gerencia de Permisos (OGPE). Hay industrias que requieren, además, certificaciones del Cuerpo de Bomberos, el Departamento de Salud y el Departamento de la Familia, entre otras agencias. En el caso de los negocios de comida, incluso podrían requerirle tener una cocina de tipo industrial aparte de la que utiliza para su familia.

Por el otro lado, Paniagua señaló que trabajar desde la casa puede representar alivios contributivos, ya que puede deducir como gastos del negocio parte de los costos de electricidad, agua, y otros servicios relacionados con la actividad que realiza.

La experta recomienda que, si su plan es tener una empresa formal con potencial de crecimiento, debe cumplir con los permisos y las regulaciones, así como con las obligaciones contributivas para evitar problemas más adelante.

 Separe la casa del trabajo

“A mucha gente se le hace difícil hacer el balance entre lo personal y lo laboral cuando trabajan desde la casa”, comentó Paniagua.

La mejor manera de marcar esa división entre la casa y el trabajo es designar un espacio dedicado, exclusivamente, al negocio. En la mayoría de los casos será una oficina, pero también puede ser el taller, la cocina o un almacén, lo importante es que pueda cerrar la puerta para que el resto de la familia entienda que está trabajando, o para desconectarse cuando termine la jornada.

Lo segundo que debe establecer es un horario. Aunque habrán tiempos en que tendrá que trabajar “horas extras”, Paniagua señaló que es más productivo establecer una agenda con un periodo en el que se concentrará solo en el negocio, en lugar de estar todo el día tratando de mezclar las tareas de la familia con las del trabajo.

“Uno de los retos es que como están en la casa y no tienen un jefe, si no son disciplinados se puede trastocar la rutina. Si solo tiene 3 o 4 horas para trabajar, que sea lo más concentrado posible para que tenga resultados”, añadió.

Y, por último, resista la tentación de quedarse en pijamas. No tiene que ponerse mangas largas y corbata, o un traje y tacones, pero cambiarse de ropa le enviará el mensaje a su cerebro de que está en la casa para trabajar, no para dormir.

 Cumpla con los permisos

Paniagua aclaró que no todos los negocios se pueden establecer en el hogar. Igual que en un local, OGPE tomará en consideración el tipo de operación y la zonificación del lugar donde reside antes de emitir el permiso.
Mencionó, por ejemplo, que en algunas zonas residenciales no puede recibir clientes ni colgar rótulos. En estos casos, solo podría tener una oficina, o un centro de operaciones, y reunirse con los clientes en otro lugar. Tampoco obtendrá permisos para talleres de ebanistería o de mecánica en las áreas residenciales. Esto ha variado un poco hoy día en Puerto Rico. Siempre busque toda la información necesaria de acuerdo a su país o a la región donde piensa establecer su negocio.

Un tipo de negocio común en los hogares son los servicios de banquetes y de confección de bizcochos o dulces, y en ambos casos necesita cumplir con una serie de regulaciones que podrían incluir hasta tener una cocina con equipos comerciales, y que esté aparte de la que utiliza la familia.

Recuerde que también debe registrarse como comerciante, y en muchos casos cobrar y remitir el impuesto al consumo (IVU), así como cumplir con las contribuciones correspondientes. Como dueño, también tiene la obligación de rendir la planilla federal si sus ingresos del negocio sobrepasan los $ 300 al año.

 Y si va a contratar personal, así sea por servicios profesionales, Paniagua sugiere adquirir un seguro del Fondo del Seguro del Estado para que esté cubierto en el caso de que alguien tenga un accidente trabajando en su casa.

Aspecto legal

En el portal Start up Nation, Barbara Weltman recomienda registrar el negocio como una entidad legal separada para proteger sus activos personales. Lo más fácil para comenzar es operar como un DBA (“doing business as”), que no requiere ningún trámite gubernamental y los ingresos se registran en la planilla de contribución sobre ingresos personal.

Sin embargo, Weltman señala que, dependiendo la naturaleza del negocio, debería considerar adoptar una entidad legal que limite su responsabilidad personal, como una corporación o una LLC (“limited liability company”). Bajo estas figuras su casa, auto y otros activos personales están protegido de reclamaciones de los acreedores del negocio. La decisión también debe tomar en consideración el aspecto contributivo, por lo que sería útil consultar con su contable.
El trámite de crear estas entidades legales tiene un costo, el cual variará, dependiendo de si lo puede hacer usted mismo o si contrata a un abogado para que lo haga.

No se encierre

Paniagua, quien trabaja desde su casa, urgió a resistir la tentación de quedarse encerrado todo el tiempo. Además de mantener la salud mental, la autora señaló que es importante cultivar relaciones en su segmento empresarial y mantenerse actualizado en el aspecto profesional.

“Puede hacer alianzas y colaboraciones con otros profesionales para que no se sienta tan solo, porque a veces uno necesita el tipo de interacción como el que se da en las oficinas”, puntualizó, y añadió que es útil pertenecer a redes profesionales u organizaciones empresariales que le ayuden a expandir su red y crecer el negocio.

En aspecto educativo, recomendó combinar cursos o información disponible en internet, por seminarios presenciales, ya que en estos últimos también da a conocer su negocio.
“A veces le cogemos el gusto al internet y no salimos a actividades. Pero el contacto humano es importante para crecer y para hacer los contactos, que te conozcan”, afirmó.